Llega el día 52 al Desafío, que ahora debe resignarse a ser comentado en diferido, porque estamos en los días iniciales de PDNT. Para resumirles, Juan David retorna a la Tribu, donde los ánimos entre castillo y sus coequiperos siguen caldeados. Tras minutos de larga y soporífera convivencia, la prueba territorial que mantuvo a los retadores en Hotel Safari fue la de ir en una pista de obstáculos con una catapulta para encestar siete balones en unas redes. Esta vez la apuesta fue de 100 millones ( pensé que se apostaría el todo por el todo) y aun así, Martín quedó como molesto… ¿será que ve el fantasma de la eliminación entre manos?.
En el 53, obviando los eternos conflictos de Castillo con su equipo, la jartísima convivencia con la tribu Cerer y el enésimo safari con el grupo ganador, debemos decir que para ganar el último Desafío de Salvación de la fase de equipos, los equipos tendrían que hacer rodar los eternos pesados cubos que vimos en años anteriores, por una pista en forma de zig-zag, para armar una pirámide de 3, 2, 1 que deberá coincidir con la figura asignada a cada uno de ellos. A media marcha, las celebridades tuvieron que superar su lentitud inicial y gracias a ello aseguraron su pase a la Fusión sus actuales 5 participantes, mientras que entre los verde-azules, alguno se quedará con las ganas de vivir la Fusión.
Para el episodio 54, Juan David sigue en cámaras comentando que en su equipo no jugaron con estrategia. Pero a su vez, teniendo en mente que sus enemigos a vencer eran los azules originarios de la competencia. Demasiado tarde para penarlo, ilustre celebridad Lista H. Pero mientras en la competencia los participantes pasean en ropa interior por los pasillos de una Casa, en el Hotel Safari, la farisea Stephanie sigue echándole flores al escritor de pacotilla, pero por detrás se jura y rejura la super finalista, cuando todos sabemos que ha llegado por arrastre.
La última prueba individual de la fase de dos equipos era de eliminación por etapas, basadas en la resistencia y el equilibrio, prueba ya usual en la competencia. Uno a uno fueron cayendo, en su orden, Stephanie Carrillo, Jaime, Crespa; y en la fase final, de equilibrio en un barril. entre Martín y Bigote’e brocha, este último se quedó con el sexto cupo fijo a la Fusión.
Interesante escenario el que nos queda para el día 55: ¿quien se quedará sin pisar la Fusión y se irá sin un peso? ¿Será la intrigante Stephanie? ¿Se desharán del inmamable Martín? ¿Saldrá la Crespa con sus pelos a otra parte? ¿O al escritor de pacotilla le dirán como en su libro “Open The window para que la mosca fly”? Por mi, cualquiera de los cuatro que quede eliminado es ganancia.
De todos modos, las celebridades optaron por rescatar a Carrillo, y aunque la votación entre los retadores quedó con la Crespa con 2 votos, Jaime obtuvo 2 y Stephanie se llevó 1 voto, que de nada sirvió, lógicamente. Y la prueba que mandaría a casa a uno de los retadores originarios consistió en la clásica prueba de atravesar una pista de obstáculos ida y vuelta encerrados en una bola -jaula de cuerdas, hasta poder liberarse. Aunque Jaime llevaba buena ventaja, Crespa es la que se lleva el cupo a la Fusión. Bueno, al menos nos deshicimos del escritor de pacotilla… por pasiva. Si y en tu cara te lo digo, Jaime, ¡lárgate sin un peso!
Esta será la Fusión más tempranera de todas las que hemos cubierto: en 2009 fue en el día 64, en 2010 llegamos al día 70 para lograr esta etapa, Para el 2011 la logramos ver apenas en el 75 y en 2012 lo fue en el 78. O sea, nos recortaron 22 largos y soporíferos episodios de un año al otro. ¿Será que llevan al África para que cante en la Fusión a Ivan Villazón, en desagravio por el no uso de su trillado tema? ¿O Margarita Rosa bailará el Waka-waka?
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