El post juicio deja posiciones encontradas entre el poco guayabo que tuvo la decisión de los cachacos y el “medalomismo” de los costeños (principalmente John Jairo Larios shirtless), aunque no vi a Anais muy convencida con la salvación al paisa, pero, bueno, asi es la democracia. Vi muy contentitos a los azules por el retorno de su ficha foránea sin camisa (¡y buen deleite de ojo!). Definitivamente, la salida de Arlex refresca el ambiente entre los azules, aun con las limitantes que ellos mismos reconocen tener (como el sabido equilibrio).
Taliana Vargas, la valla de Avon viviente en Desafio La lucha de las regiones, nos habla sobre el reto de azules y verdes, diezmados en número, y linda escena de la fauna panameña ( tortugas, micos…). Los costeños saben qué les conviene mas y que no hay enemigo pequeño.
Los verdes, a punta de coco, ven el duro reto que les toca, y bueno, ya sabemos los delirios alimenticios de Chucho y el fastidio de todos los verdes por zafarse de Playa Baja.
Taliana Vargas es taaaaan mecánica presentando que ya parece una maquina de dictado. Prueba de fuerza y con muchos obstáculos es la que nos ocupa hoy. Por los costeños descansan Marie y Stephanie, y los azules resistidos a dejar Playa Alta empezaron la serie, pero en la cúspide vino el lío para todos los equipos, sobre todo, para los verdes, dado el pesado baúl, que puso en desespero a todos. Desde la distancia, Stephanie hacia barra por su equipo. Y entre los azules, esa cadena estaba que degollaba a Fabián. Los verdes estaban estancados, fruto, tal vez, del hambre sufrida. La santandereana, como por variar, discutiendo por todo, y Anais nos demostraba la fuerza de las mujeres costeñas, de la cual no veo en Maria C.
Los verdes desistieron, supuestamente, pensando en la salvación, generando mas conflicto en el grupo emigrante, pero los naranjas perdieron mucho tiempo descifrando el mensaje, tiempo que le sirvió a los azules para ganar ventajas significativas. Resultado: Las mismas playas de la semana pasada, dado el abandono de los verdes y la lentitud con que los naranjas resolvieron el acertijo. Definitivamente los verdes están en nada, y lo conflictiva de la santandereana le debe granjear, ojalá en breve, su tiquete de regreso a casa.
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