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¿Quién mató a Pablo Escobar? Pues depende a quién se le haga la pregunta. El estreno de El cartel en el Canal Caracol ha suscitado varios debates alrededor de la exactitud y veracidad de la historia que se ve en la pantalla. Se entiende que se trata de una adaptación para televisión basada en una versión y que, por lo tanto, los hechos no se ajustan totalmente a la realidad. Además, la producción tiene licencia artística para contar los hechos a su manera. Sin embargo, debo simpatizar con la inconformidad del General Naranjo. Es que no hay otra forma de decirlo; en El cartel la Policia Nacional no solamente no sale bien librada sino que los pintan como unos perfectos mamarrachos, unas caricaturas, unos funcionarios de pensamiento excesivamente simple. Los diálogos entre policias en El cartel se asemejan a los diálogos entre el ‘botijas’ y el ‘chómpiras’ en Chespirito. Pero los que quedan como unos perfectos idiotas no son solo los policías; en El cartel todo el mundo es un idiota.
Me estoy viendo El cartel y lo seguiré viendo hasta el final; creo que todos los colombianos deberían verlo para recordar, en lo posible, esa etapa de la historia reciente de Colombia. Sin embargo no puedo evitar pensar que Caracol, por el afán de salir al aire o simplememente por falta de talento, desperdició una gran oportunidad de construir una historia fuerte e impactante con verdaderos personajes… humanos. Como están las cosas, a los televidentes realmente no nos interesa mucho ningún personaje pues casi todos son unos imbéciles.
Cuando aparece el personaje de Robinson Diaz con ese bigote uno no sabe si está viendo Cómplice$ o El cartel. Se salvan los personajes de las esposas y novias de los mafiosos (a propósito, bien Carolina Cuervo y Juliana Galvis mientras que Karen Martinez… floja como siempre). A veces en otras producciones uno se encariña hasta con un villano; en El cartel el televidente no se encariña con nadie. Todos los personajes de El cartel, por lo menos los hombres, son unos mamarrachos poco creibles, sin nigún tipo de dimensión humana.
Las series basadas en hechos históricos tienen dos posibilidades: 1) tratar al máximo de ajustarse a la realidad, ó 2) basarse en los hechos para construir una historia mas atractiva para televisión con personajes y hechos mas interesantes. El cartel no es ninguna de las dos, es un híbrido. No cuenta la realidad como realmente ocurrió ni tiene personajes interesantes, solo un montón de matones. ¿Entonces? Volviendo a los policías de El cartel, es absurdo que en el primer capítulo el Coronel encargado del bloque de búsqueda se encuentre en una playa veraneando totalmente solo mientras en Medellín es asesinado Pablo Escobar. No tiene sentido que haya decidido irse solo a Cartagena el señor; por lo menos hubieran puesto a una lobita al lado en bikini. ¿Que quién mató a Pablo Escobar? Yo le creo en alto porcentaje al General y la serie El cartel la tomo como 100% entretenimiento.
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