La tensión se apoderada de los naranjas, ad portas de un nuevo desafío final, y en donde las susceptibilidades, sobre todo entre Silvio y Emerson, en torno a una nominación, salen a flor de piel. Toya Montoya, en su conversatorio previo a la prueba trata dehacerles ver que, pase lo que pase, solo uno ganara. Y volvemos a otra deliciosa prueba de sortear obstáculos completamente vendados y recorrer seis veces la pista, linda prueba donde la pertinaz lluvia panameña hace de las suyas y donde quien gane será casi de chiripa o por contar con muchísima capacidad de recordar la pista antes de jugar. Emerson llega primero a los cubos de donde sacará sus fichas, en medio de una descoordinación tenaz, y mientras Jonathan trata de ser solidario con Martha, Natalia encaja su primera ficha, y así, poco a poco, y en medio de las imprecisiones propias de una prueba como estas, la paisa logra completar las 6 fichas requeridas para ganar la prueba, con la responsabilidad que ello conlleva.
Y mientras arrecie la lluvia en Playa Alta, el “triángulo” será el que defina el nominado entre los naranjas por parte de los azules, mientras Natalia empieza a pensar a quien nominar, en medio de una parodia que hace el ex alcalde de la mas reciente payasada de Daniel, quien sigue con el asunto de tratar de ser el emisario azul y su terco regionalismo trasnochado, que de nada va a servirle, pues la enviada será Gina, a quien el ex capitán paisa trata de venderle la moto y seguir con su pataleta; que solo hace enturbiar el ambiente entre los azules; mientras Silvio trata de ganarse con la labia lo que dejó de ganar en el terreno de juego.
Y a Víctor Mallarino le corresponde presentar la prueba que enviará a un costeño de retorno a casa, con un conversatorio que bien puede prescindirse. Natalia nomina a Martha, y deja muy en claro que no quiere influenciar el voto azul, aunque Mallarino insiste y ella postula a Silvio, pero Gina termina nominando a Emerson, y tras una aburrida despedida de los naranjas, la prueba que define la estadía en el juego queda supeditada a otra prescindible llegada de Gina a su playa, las palabras de un sobrevaluado – pero por él mismo- Daniel, y la de los naranjas en Playa Alta.
La prueba consiste en recorrer una pista encerrados en una bola-jaula y retornar. A ambos se les dificulta hacer girar la bola, pero Emerson logra impulsarla con su propio peso, relegando a la jugadora costeña, quien hace lo que puede para mover esa mole metálica, resignándose lentamente, mientras el técnico capilar ya inicia su retorno, pero todo se queda en una suerte de punto muerto en que ella no desea seguir avanzando y él prefiere esperarla, pero finalmente es él el que logra avanzar al siguiente ciclo, en medio de su dolor por tener que eliminar a la morena del flow, y dejando sin representación femenina a la Costa Atlántica.
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